' Ángel Caído' de Silvia Muñoz Hay un tipo concreto de médico que me fascina. Edad media. Aplomo y sabiduría a partes iguales. Saber estar. Buen profesional, mejor humano. Escucha, asiente, educa, sonríe y acompaña. Hay muchos así. Llevan dentro la energía latente y la calma infinita del mar. Reaccionan con determinación ante las circunstancias más adversas, y ya han tenido suficientes vidas (y muertes) a su cargo como para comprender la importancia de los detalles más pequeños y el poder sanador de una caricia. Es el tipo de médico que algún día me gustaría llegar a ser. Ver a estos profesionales derrotados durante la pandemia, fragmentarse, descomponerse y llorar, me parte el alma. Es incongruente. Como si lloviera hacia arriba o hubiesen dado la vuelta a los relojes. Como ver ángeles caídos. Siento que la tierra ha cambiado el sentido de giro. Que vuelven los positivos y los ingresos, las cifras suben y el cronómetro cuenta los segundos hacia atrás. Hasta que estén...
Diario de un rotatorio y memorias de una bata.